Los cigarrillos electrónicos, conocidos como vapeadores, se han convertido en una preocupación creciente para padres de familia en Colombia. Estos dispositivos no están regulados en el país, lo que ha permitido que la industria los promocione de manera atractiva y accesible para niños y adolescentes, a pesar de que estudios científicos han demostrado que son más dañinos para la salud de lo que se pensaba inicialmente.

El Problema: A pesar de la falta de regulación, los vapeadores se han posicionado como una alternativa aparentemente más segura al cigarrillo tradicional y como una ayuda para dejar de fumar. Esto ha llevado a un aumento en su consumo, especialmente entre jóvenes que nunca antes habían fumado. Sin embargo, la realidad es que la ciencia ha revelado que vapear es mucho peor para la salud que fumar cigarrillos convencionales, y el daño es más rápido y grave de lo que se creía.

La Lucha por la Regulación: Recientemente, la Revista Semana publicó un artículo que arrojó luz sobre esta problemática. En respuesta, se ha lanzado la iniciativa #LeyVapeadoresRegulados, con el propósito de regular los cigarrillos electrónicos con medidas de control similares a las de los cigarrillos tradicionales. Hasta ahora, más de 12,791 personas han firmado la petición, pero la meta es alcanzar 500,000 firmas para presionar a las autoridades.

Un Llamado a la Acción: La Red de padres de familia, cuidadores, educadores y la comunidad en general se encuentra movilizándose para proteger a las nuevas generaciones de los peligros de los vapeadores. Se hace un llamado a unirse a esta causa crucial para la salud de nuestras niñas, niños y adolescentes, compartiendo el enlace de la petición y recogiendo firmas.

Conclusión: La falta de regulación de los cigarrillos electrónicos representa un peligro inminente para los jóvenes en Colombia. La lucha por la regulación de estos dispositivos es urgente y está cobrando fuerza. La Red de apoyo está creciendo, y con la participación de todos, se espera lograr un cambio significativo para proteger la salud de las futuras generaciones. No más cortinas de humo, es hora de actuar.